Difficultad Fácil
30 Min
Entrante
8 Porciones
1
Preparamos la polenta: ponemos al fuego un cazo con 650 ml de agua, salamos y llevamos a ebullición. Cuando el agua hierva, vertemos la harina de maíz poco a poco sin dejar de remover. Seguimos removiendo con una cuchara de madera durante unos minutos siempre en el mismo sentido, manteniendo la ebullición. Al cabo de 8 minutos, la polenta está lista
2
Disolvemos el curry en 2 cucharaditas de agua y 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
3
Condimentamos la polenta con el curry disuelto y la vertemos en una fuente previamente engrasada, nivelamos y dejamos enfriar.
4
Guacamole: escaldamos los tomates dos minutos en agua hirviendo, luego los escurrimos y pelamos. Les quitamos las semillas y los picamos. Reservamos un poco para decorar.
5
Picamos también la cebolleta con la guindilla. Pelamos el aguacate y lo deshuesamos, picamos y aplastamos con un tenedor.
6
Mezclamos los ingredientes (la cebolleta, el tomate y el aguacate). Aliñamos con zumo de lima, salpimentamos y añadimos dos cucharadas de aceite.
7
Dividimos la polenta en pequeños rectángulos, los pincelamos con aceite y los tostamos en el horno a 200°.
8
Colocamos los rectángulos de polenta en bandejas y ponemos encima el guacamole, luego decoramos con los dados de tomate que hemos reservado y la guindilla picada.
