Nuestro método exclusivo - Polenta Valsugana

Seleccionamos cuidadosamente los mejores granos de nuestro maíz, cultivado en Italia bajo la atenta supervisión de rigurosos controles.

DESPLAZARSE HACIA ABAJO

DEL CAMPO

Agrónomos especializados, protagonistas de la primera fase de la producción, siguen atentamente todas las fases de crecimiento de la materia prima. Tras la siembra, la cosecha se realiza con trilladoras especiales para evitar la contaminación de alérgenos. Del desmenuzamiento de las mazorcas se obtienen los granos, los cuales se someten a un cuidadoso proceso de secado y limpieza. Al reducir la humedad de los granos, se conservan sus características nutricionales y de sabor. Con un selector óptico, los agrónomos someten los granos a una prueba que solo pasan los mejores.

AL MOLINO

El maíz seleccionado, 100 % italiano, se lleva al molino, donde tiene lugar la segunda fase, la molienda de la que se obtiene la harina. Para la Polenta Valsugana Clásica solo se muelen las partes más nobles del grano, para obtener una harina con un bajo contenido en grasa y que se digiere fácilmente.

HASTA EL ESTABLECIMIENTO

En la última final, la polenta empieza a cobrar vida. La harina, ya parcialmente limpia en el molino, se somete a otros análisis prestando atención a dos aspectos fundamentales: la granulometría, que es esencial para garantizar que no se formen grumos durante la cocción, y la pureza, es decir, la ausencia de cualquier germen que pudiera estar presente durante la molienda. Este es el momento en el que aplicamos nuestro método: la exclusiva doble cocción al vapor, gracias a la cual se obtiene una doble ventaja: la rapidez de cocción y ese irresistible sabor.